Capítulo 57
1486palabras
2023-03-03 00:01
En Grupo Bo.
Bo Yanxi se reclinó contra el respaldo de la silla y sus dedos delgados rápidamente se deslizaron por la pantalla de la tableta. El titular de la noticia se transmitió a su mente.
Cuanto más leía, más feo se volvía su rostro.

Resultó ser que este era el tipo de vida que Nan Qi solía vivir.
Con razón era más madura que la gente común; con razón era una persona tan decidida.
No estaba sorprendido.
Ella quería dejar las cosas claras con él y nunca aceptaría un regalo que no le correspondiera. Tras haber sido lastimada tantas veces en el pasado, solo podía esconderse como un erizo asustado.
El tesoro que él tanto quería cuidar había sido tratado con tanta dureza por sus propios padres y los adoptivos.
Ni siquiera sus compañeros de clase la dejaban tranquila. No dejaban de acosarla y atacarla...

¿Desde cuándo era el turno de que alguien arruinara el tan preciado tesoro de Bo Yanxi?
Él no podía hacer nada respecto de la muerte de sus padres adoptivos. Además, sus padres biológicos estaban relacionados a ella por sangre, por lo que él no podía hacerles nada. Pero ¿quién más podía ser?
Bo Yanxi dejó la tableta con un chasquido, agarró su teléfono y marcó el número de Tang Yan. "Pueden divulgar públicamente el documento".
Unas horas más tarde, los internautas volvieron a causar un alboroto.

El registro completo de un chat y unas grabaciones de llamadas se subieron a internet.
En los registros se podía ver que alguien había gastado mucho dinero en intentar arruinar la reputación de Nan Qi.
Incluso luego de que el Ministerio de Educación informara sobre los resultados de la investigación, esa persona seguía rehusándose a rendirse y quería calumniar al equipo de investigación.
Los internautas enseguida descubrieron quién era la mente maestra detrás de escena. Era Zhao Wen, la hija mayor de la familia Zhao que fabricaba cosméticos y había sido compañera de clase de Nan Qi.
Muchos estudiantes salieron a testificar que hacía mucho tiempo que Zhao Wen la acosaba a Nan Qi. Además, ella los había obligado a apostar e incluso la había hecho a Nan Qi arrodillarse ante ella.
"No digas nada, los acosadores del campus deben ser castigados".
"Las señoritas de las familias ricas son realmente increíbles. La gente pobre como nosotros siempre es acosada, no importa cuán buenos sean nuestros resultados".
"Todos vieron la apuesta y el proceso completo en el chat grupal. Te dejaré ver la verdadera cara de esta jovencita rica. Historial.fotografía.jpg".
"No estudié lo suficiente y no puedo solventar el ingreso a una escuela noble. Por eso, quiero saber si difundir rumores es ilegal. ¿Es ilegal contratar a trols en línea para difamar la reputación del equipo de investigación?".
Nan Qi, dura aunque lamentable, ya había logrado que los internautas se sintieran angustiados. Las palabras de Zhao Wen eran demasiado violentas y su actitud arrogante, por lo que hicieron que los internautas estallaran enseguida.
"Al final, lo que ella quería era calumniar al equipo de investigación del Ministerio de Educación. ¿Qué tipo de joven arrogante y dominante era?".
"Ella es demasiado capaz".
"Pensar que una persona puede llegar a ser tan arrogante. Realmente ha logrado ampliar mis horizontes".
"Nan Qi era tan miserable. La vida ha sido muy cruel con ella como para que conociera a semejante compañera de clase".
Los abogados, gracias a su sentido de justicia, no pudieron ya quedarse quietos. Todos expresaron su voluntad por proveerle a Nan Qi ayuda legal gratuita.
Como empresa con conciencia y sentido de responsabilidad social, el departamento de legales del Grupo Bo enseguida dijo que estaban juntando evidencia y que investigarían a fondo a Zhao Wen y a los trols en línea involucrados en el incidente.
Los trols que habían sido contratados entraron en pánico y comenzaron a querer limpiar sus nombres y depositaron toda la culpa en Zhao Wen.
Ambos lados eran como perros atacándose unos a otros y estuvieron involucrados en noticias negativas y terribles...
Cuando Nan Qi vio la información, se quedó atónita.
Por supuesto que sabía lo que Zhao Wen había hecho y tenía toda la evidencia. Estaba esperando a que el Ministerio de Educación probara su inocencia antes de enviar la noticia.
Hacer lo correcto en el momento correcto era la única manera de lograr que el enemigo no pudiera recuperarse.
Sin embargo, nunca había esperado que otra persona lo hiciera por ella antes de que ella misma lo hiciera.
¿Quién podría haber sido?
¿El señor Bo?
Nan Qi no tenía una identidad y un estatus suficientemente fuertes. Si había alguien que podía ayudarla de todo corazón y en primer lugar, era Bo Yanxi; no podía pensar en otra persona.
No obstante, solo estaban fingiendo estar casados. ¿Por qué el señor Bo la protegería así?
Olvídalo. No pensaría en eso si no lo comprendiera, pero no sabía por qué estaba de tan buen humor.
Para celebrar, publicó de forma anónima unas capturas de pantalla de unas conversaciones entre Zhao Wen y algunas de sus amigas.
Como resultado...
Entonces, el enojo de los internautas llegó a su punto máximo.
Nan Qi decidió dejar que el tema se gestara un poco y luego regresó contenta a su habitación a jugar.
Bo Yanxi regresó a casa a las 9 de la noche.
Nan Qi no estaba mirando televisión en la sala de estar como siempre, por lo que decidió llamar a su puerta.
Luego de un rato, corrió a abrir la puerta. Tenía puesto los pijamas de pato amarillo con las pantuflas que combinaban.
"¿Qué puedo hacer por ti, señor Bo? Estaba justo duchándome".
Estaba toda mojada y su cuello blanco como la nieve estaba apenas enrojecido. La fragancia de su cuerpo se mezclaba con la del gel de ducha y desprendía un aroma dulce.
Bo Yanxi enseguida miró hacia otro lado y no se atrevió a mirarla nuevamente. Levantó el pequeño pastel que tenía en la mano y dijo: "Te traje un pastel".
Mencionar de nuevo el pasado de Nan Qi equivalía a ponerle sal a sus heridas.
No sabía cómo consolarla, por lo que pensó que lo único que podía hacer era comprarle un pequeño pastel.
Su secretaria le había dicho que era muy sencillo lograr que una chica se sintiera mejor; regalarle algo dulce sería suficiente.
"Gracias, señor Bo". Nan Qi no comprendía por qué había querido regalarle un pastel, pero de todos modos, lo aceptó con alegría.
"¿Hay algo más que desees? Hace tanto tiempo que estamos casados y nunca te he dado un regalo". Su secretaria también le había dicho que a todas las chicas las ponía felices recibir regalos.
"¿Está todo bien?", le preguntó Nan Qi luego de pensar por un momento.
"Por supuesto".
Bo Yanxi se puso de buen humor enseguida.
Nan Qi estaba dispuesta a aceptar el regalo. ¿Quería eso decir que estaba comenzando a abrirse a él?
"Entonces, deseo que los dos guardaespaldas no me sigan todos los días".
Su pedido lo tomó a Bo Yanxi por sorpresa.
Nan Qi bajó su cabeza avergonzada. "Todavía no estoy embarazada, por lo que puedo cuidarme sola. Gastas mucho dinero para que me sigan todos los días, ¿verdad?".
Bo Yanxi hizo una breve pausa.
Por un momento, no pudo pensar con claridad.
Al final del día, ella todavía quería marcar una línea clara con él.
Incluso si ella estaba dispuesta a que convivieran temporariamente como marido y mujer, no estaba dispuesta a aprovecharse de él.
¿Qué tipo de vida había vivido esta chica? Era tan joven y la habían lastimado tanto.
Bo Yanxi no pudo evitar levantar su mano y acariciarle el pelo largo y húmedo con expresión de afecto en sus ojos. "Eres mi esposa y esta también es tu casa. En esta casa y a mi lado, puedes hacer lo que desees y decir lo que sea que tengas ganas. Nadie se va a disgustar y nadie te echará".
Nan Qi abrió sus pequeños ojos bien grandes. "Pero todo esto es falso. Dentro de un año, tendremos que divorciarnos".
Bo Yanxi volvió a contener la respiración y sintió que su estado de ánimo se complicaba.
Al final, solo pudo dejar salir un largo suspiro. "Acuéstate temprano. Si quieres algo, solo tienes que decírmelo".
"Bueno...".
Nan Qi regresó a su habitación con el pequeño pastel y le dio un mordisco. El rico sabor a leche mezclado con el de las fresas era dulce.
Entrecerró los ojos con alegría y dejó escapar un suspiro de lo más profundo de su corazón. "El señor Bo es tan bueno".
El sabor dulce y fuerte se desvaneció y el sabor en su boca lentamente se volvió amargo.
Entonces, la sonrisa en el rostro de Nan Qi también se desvaneció gradualmente. Levantó una mano, se la llevó al corazón y susurró para sí misma: "Bo Yanxi, no seas tan bueno conmigo. ¿Qué si me acostumbro y luego no logro irme...? ¿Qué debería hacer?".